~Beso sabor café~

Capitulo 2. 

-         No, bueno si, bueno… no se. – Dice ella, mirando al mar, es imposible que haya estado allí tanto tiempo. Cuando salió de la fiesta en la que paso todo eso, eran las 4, son las 6 de la mañana. Menos mal que sus padres pensaban que dormía en casa de Sun, su mejor amiga.

El chico se levanta y le extiende la mano a ella, que la rechaza.

-         Venga Laura, no seas así. Vamos, te invitaré a un café en mi casa, no hay nadie y desde ahí, podrás ver el mar también.- la chica niega con la cabeza-Laura, si no aceptas tu, te tendré que llevarte yo.

La coge como si fuese un saco de patatas y camina en dirección a su casa, ella solo patalea y le grita que le baje pero el hace de oídos sordos.

Al llegar a su casa, la sienta en el sofá. Prepara dos cafés y charlan sobre lo ocurrido. Es encantador. Los dos se observan atentamente, poco a poco se acercan. Sus frentes están pegadas y se besan. Es un beso lleno de sentimientos, sentimientos y café, es un beso sabor a café con leche. El beso más dulce de todos.

Uno tras otro, los besos continúan. De fondo, el sol va derrotando poco a poco a la oscuridad como todos los días ocurre. El sonido del timbre les despierta, están los dos abrazados tumbados en el sofá. Marcos se dirige a la puerta y por la mirilla descubre que es su amigo Santi, no, no puede ser. Avisa a Laura y la dice que suba arriba y se esconda, ella no entiende muy bien lo que está pasando pero obedece. La puerta se abre, y Lau desde arriba escucha atenta la conversación :

-         Marcos…- Dice Santi, su voz es ronca, diría que había estado llorando.

-         ¡Santi! ¿Se puede saber que te ha pasado? – Marcos no entiende nada, su amigo tiene los ojos rojos, al igual que la noche anterior los tenia Laura. Está despeinado y sus vaqueros están manchados de sangre.  

-         No es nada, tuve un accidente.

-         ¿Un accidente? – Marcos no puede salir de su asombro.

-         No vengo a hablar de eso, necesito tu ayuda…- los dos se miran a los ojos, los ojos de Santi revelan que dice la verdad.

Marcos no sabe que hacer, tiene miedo a lo que su amigo le diga y ahora mismo no es el mejor momento para que hablen, Laura está arriba escuchando toda la conversación.

      -    De acuerdo- Dice muy convencido.- Pero no tengo mucho tiempo para hablar…

      -    Tranquilo solo será un momento.

Los dos amigos se sientan en el sofá y comienzan a hablar.

Desde arriba, Laura esta indecisa, quiere saber lo que está pasando pero sabe que si baja corre el riesgo de que la descubra allí Santi y todo acabe mal. No es eso lo que desea. Piensa. Cuando se quiso dar cuenta, estaba bajando las escaleras, su corazón había derrotado a su cabeza y era eso lo que deseaba. Último escalón, se dirige a la puerta del salón. Bien, esta medio cerrada, como pensaba que la dejaría su novio, ¿novio?¿está saliendo con Marcos?. Que mono es. Cuando la mira a los ojos se derrite, son tan preciosos. Un escalofrío le recorre el cuerpo. Céntrate Laura, estás aquí para saber que es lo que hablan.

-         Santi, no lo hagas…- Marcos parecía preocupado.